La Poesía

La Poesía

La poesía

Este periodo abarca el Renacimiento y el comienzo del clasicismo. Heredero del pasado británico, acusa también Ia influencia de Italia: Petrarca y Dante, Tasso y Ariosto, los autores griegos y latinos, en particular Homero y la filosofía platónica, conocidos a veces a través de los autores italianos. Como Chaucer, los poetas hallan a menudo inspiración y formas nuevas en los autores italianos y, cada vez con mayor frecuencia, en los franceses.

 

El mecenazgo de la Corte condiciona la producción artística y contribuye a aproximar las diversas maneras de expresión : la música, con los madrigales donde se realza el valor del texto. John Dowland, Orlando Gibbon y Thomas Campion, todos ellos poetas, son los principales compositores. Expresan el refinamiento y la melancolía de gentileshombres parecidos a los que pintaba el miniaturista Nicolas Hilliard. Los arquitectos edifican suntuosas moradas, como Wollaton Hall o Nonsuch Palace, que sirven de marco a veladas musicales, poéticas o dramáticas. De la mayor parte de las obras isabelinas y del periodo de Jacobo I se desprenden una notable unidad y una personalidad nacional.

 

Thomas Wyat (1503-1542) y el conde de Surrey (1517-1547) publicaron sonetos, algunos de ellos adaptaciones de Petrarca, en la Miscelánea de Tottel (1557). Surrey tradujo la Eneida en versos blancos; ambos aparecen hoy más por los temas y formas que introdujeron que por sus poemas. En Arcadia, de Sir Philip Sidney (1590), se incluyen canciones y églogas donde el poeta experimenta la sextina, estrofa de seis versos, con un tercero (Triplet) para concluir; el tema es pastoril, vemos pastores y ninfas enamoradas, en un paisaje idealizado. En Astrofel y Stella, Sidney canta al ‘’Enamorado de la estrella’’ y a ‘’la estrella’’ (Penélope Devereux); es un ciclo de sonetos a los que se añaden once cantos; en ellos se hace una fina burla del amor petrarquizante; los sentimientos profundos se expresan púdicamente, a través de los rasgos de ingenio (wit), las imágenes y los símbolos. Su Apología de la poesía se opone a las actitudes puritanas que aparecen en los medios religiosos. He aquí el comienzo de un soneto que muestra la elegancia del estilo :

 

Leave me, O Love which reachest but to dust ;

And thou, my mind, aspire to higher things;

Grow rich in that which neuer taketh rust,

Whatever fades but fading pleasure brings.

 

Edmund Spenser (15527- 1599) dedicó el calendario del pastor (1579) a Sidney, que le había animado a escribirlo; se compone esta obra de doce églogas, una por cada mes del año; es pastoril, y hay en ella arcaísmos deliberados, como en su poema épico, La reina de las hadas (1590-1596). Los seis libros que los componen (el último, inacabado) ofrecen varios niveles de sentido : formación del gentilhombre (El caballero de la Cruz Roja) en las virtudes de la santidad, la templanza, la castidad, la amistad, la justicia y la cortesía; implicaciones políticas y religiosas (la gloria de la reina Gloriana ; la defensa del protestantismo contra la mujer ‘’escarlata’’, de obediencia romana) por medio de alegorías de inspiración medieval : empresa caballeresca que no excluye una sensualidad muy de su época. La lengua, pero también algunos elementos de la prosodia, son antiguos (aliteración y juegos de sonoridades). La estrofa inventada para este poema ocho endecasílabos yámbicos terminados por un alejandrino confiere al conjunto una belleza y una majestad extrañas. Veamos un pasaje del combate entre el caballero y el dragón:

 

By this the dreadfull Beast drew ningh to hand,

Halfe flying, and halfe footing in his hast,

That with his largenesse measured much land,

And made wide shadow under his huge wast ;

As mountaine doth the valley overcast

Approching nigh, he reared high afore

His body monstrous, horrible, and vast,

Which to increase his wondrous greatness more,

Was swolne with wrath, and poyson, and with bloody gore.

Book I, canto XI

Así se aproximó la bestia horrenda, Medio volando, medio andando, en su presura, cubriendo mucho suelo con su masa y tremenda Y arrojando

ancha sombra su inmensa, envergadura ;

Cual montaña que el valle nubla oscura,

Muy cerca ya, encabritó, rampante, su monstruoso cuerpo, de vasta contextura,

Que para alzar aún más su alzada de gigante,

Se infló de ira, y veneno, y sangre intemperante.

 

Libro I, canto XI

Spenser escribió además poemas en honor a Elizabeth Boyle, que sería su esposa : Amoretti, una colección de sonetos, y dos cantos nupciales : Epitalamio y Protalamio. Los sentimientos son sinceros; el estilo, desenvuelto; pero se le han criticado los amaneramientos italianos, muy de moda entonces. Esto es también lo que hace Shakespeare, en el célebre soneto 130, «My mistress’ eyes are nothing like the sun’’.

Los 154 sonetos del maestro de Stratford (ed. 1609) incorporan de lleno los elementos característicos de los poemas isabelinos : gracia, preciosismo, rasgos de ingenio, metáforas elaboradas; pero la pasión, el sufrimiento que en ellos se expresan, dan fe de una experiencia auténtica y hondamente Conmovedora; el misterio que envuelve siempre estos sonetos no disminuye en nada su fuerza y su atracción ; algunos temas que figuran en ellos se encuentran también en las obras dramáticas : crueldad del destino; ingratitud de los hombres, deseo carnal, metáforas del mar, del teatro, de las piedras preciosas. Esta red de metáforas constituye la paleta original del poeta, su clima, pues, aunque empleadas por otros, lo son aquí de una manera muy personal.